viernes, 8 de febrero de 2013


Nunca buscamos lo mismo, nuestras prioridades cambian con el paso de los años, quizás alguna se mantiene en esencia, pero….al final terminamos buscando no lo que realmente deseamos, sino lo que nos hace falta en cada momento y acabamos mirando en nuestro interior, mirando aquello que anhelábamos y pensando que solo es un sueño más….
¿ como diferenciar nuestros sueños de las cosas que realmente perseguimos?? Como saber si lo que soñamos y lo que intentemos conseguir es realmente lo que necesitamos o lo que nos satisface???


La búsqueda persiste y con ella también nuestras desilusiones y nuestra falta de esperanza, dicen: “mientras hay vida hay esperanza”   pero mira que se pierde pronto, sobre todo cuando hay días que `piensas si merece la pena vivir o levantarte simplemente de la cama…
Hay mucha gente que se ha quedado en el camino, pienso a menudo en todos ellos, que habría sido de sus vidas si hubiesen tenido la oportunidad de seguir adelante, si no se les hubiese terminado su tiempo…
Quien nos pone la frontera??? ¿ quien dice cuanto tenemos que vivir y de que manera ¿ es cierta aquella patraña del destino? Nunca he creído en ello sinceramente, de echo mis creencias son bastante nulas, no encajo en la idea del cristianismo, pese a que por la educación recibida no puedo evitar en  momentos de angustia implorar a un “ DIOS” que no parece que tenga tiempo para escucharnos, por no hablar ya de las ideas mahometanas o budistas ……por mucho que me coman la cabeza no me veo a mi mismo reencarnado en una araña o un  monte… cuando me muera se acabó…la sola idea en si misma ya provoca bastante angustia como para encima fastidiarla más aún preparándome hacia un viaje en forma de ballena o vete tu a saber en que…..(ale ya se salió la vena cínica., no falla…..), bueno al menos mientras trivializo y digo barbaridades no me ocupo de lo que me verdaderamente me angustia, de mi falta de motivación, de mi preocupación por el mañana, donde viviré.. como demonios saldré adelante, se que lo haré claro está…pero ¿como¿?? ¿cual será esta vez el precio a pagar??

Se que saco fuerzas de donde no las encontré nunca hay, que me hundo pero luego sobrevivo, que nadie podrá conmigo, en última instancia se que salgo adelante, pero el precio de la felicidad es caro, muy caro, ya no soy una niño y todo en esta vida pasa factura.
¿cuál será ahora??? Prefiero no pensarlo más, me da mucho miedo, muchísimo… miedo a volverme a equivocar, miedo a que se gaste de tanta presión, miedo al futuro sin duda.